miércoles, 12 de mayo de 2010

Casualidad

Ayer, como siempre la vi pasar,
mis ojos se fueron
tras la sombra
de su sutil caminar.
Hoy, con ansias espero
a que regrese,
para decirle que el viento
que causó su suspiro,
anoche me hizo soñar.
Mañana, quizá mañana,
ya no podré ocultar
el amor que de mi corazón se escapa
y que en el suyo se quiere quedar.

2 comentarios:

Sergio Morataya dijo...

Sigue en la misma línea su ideolecto estético, pero a esta si que no la conozco, qué pasa que no me invita conocerla. Estan buenos para nuestro pròximo libro. Saludos Lucerito.

jEsSiKa CuYáN dijo...

que vibrante e inspirador este escrito... hasta imagine por un momento es lugar y la persona X... hahhaha buena Lucero...

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